Si un visitante es tan desafortunado que solo puede pagar con una tarjeta de crédito internacional en Venezuela, los precios le harán pensar que se encuentra en un lugar aún más caro que Tokio o Zúrich.
Una hamburguesa cuesta 1.700 bolívares, el equivalente a 170 dólares al cambio oficial de 10 bolívares por dólar, y una noche de hotel 69.000 bolívares, es decir, 6.900 dólares. Por supuesto que ningún comerciante pone precios tomando como referencia la tasa oficial, sino la del mercado negro, en el cual un dólar se cambia por 1.000 bolívares.
Pero también para los venezolanos que ganan en bolívares, las cosas son increíblemente caras debido a la hiperinflación en esta economía altamente dependiente de las importaciones. Incluso para la clase media, que se desliza hacia la pobreza, una hamburguesa o una noche de hotel están fuera de su alcance.
http://www.portafolio.co/internacional/situacion-venezuela-496171
No hay comentarios:
Publicar un comentario